Conciliando Crianza Maternidad Reflexiones

Conciliaqué, un libro sobre conciliación que es un must.

Por

Hoy os vengo a hablar de un libro que me mandaron de regalo, pero que de cualquier manera habría comprado yo (tu puedes comprarlo aquí), de no haberse dado la oportunidad de recibir Conciliaqué de Maika Ávila, editado por Litera, que fueron los que muy amablemente me lo hicieron llegar.

Un libro sobre conciliación prepandemia (y pre-permisos intransferibles)

Antes de empezar creo que es vital que os diga que este libro se editó en 2019, antes de que los permisos intransferibles se aprobaran, como algunos reclamaban y otros rechazaban en el mismo, y antes que la pandemia por Covid pusiera patas arriba cualquier posible esquema, más o menos aceptable, de conciliación familiar, para bien y para mal.

Es curioso leer un libro que habla de posibles futuros, una vez que algunos de ellos se han cumplido, y es curioso ver como algunos puntos han acabado siendo válidos y otros no se han cumplido en absoluto.

Conciliaqué, una amplísima mirada acerca de la conciliación.

El libro que tan maravillosamente ha orquestado Maika, empieza con 10 capítulos de su propia cosecha, donde en base a su propia experiencia y otras cercanas y/o conocidas, traza un mapa de lo que supone la maternidad para las mujeres gestantes en nuestro país, y que por desgracia, post-pandemia y permisos ampliados, poco a cambiado y si acaso a mal.

Ser madre o persona gestante, o tan sólo ser sospechosa de ello (es decir, tener vulva en edad fértil), ya supone una serie de dificultades y escollos añadidos al apasionante mundo de ser mujer trabajadora. Si ya de por si soportamos una discriminación, que se ha tenido que legislar en ocasiones discriminatoriamente a nuestro favor y ni aún así se puede esquivar del todo, por ser mujeres, y sospechosas de ser seres gestantes, cuando de verdad lo somos o estamos en camino de ello, la vida nos da la espalda.

La Conciliqué: ten hijos, y luego haz como que no los tienes.

Como sociedad animamos a las parejas jóvenes, ahora incluso a las mujeres solteras, a formar una familia, y les pintamos de rosa una decisión, que, si bien en muchas ocasiones es elegida, no es aquel cuento que nos quieren contar. Puesto que el día que te conviertes en padre, pero muy especialmente en madre, te colocan un ancla en el tobillo, y la sociedad te pone todas las trabas del mundo para mantener y sostener a esa familia. Salvo que aceptes volver a la dinámica de nuestros abuelos (que alguien no trabaje o que los abuelos se conviertan en padres) o convengas colar por el sistema de engendrar criaturas para que las cuide el estado. Poco más y lo podemos considerar gestación subrogada.

En estos primeros capítulos, Maika nos habla de lo que ocurre cuando das a luz, como esa corresponsabilidad soñada, por mil y una razones, raramente se parece a lo que necesitamos. De la precariedad que nos lleva a no tener hijos, tener menos, tenerlos tarde y/o tenerlos mal, y de como ese instinto que nos venden, si es que existe, queda aplastado por el sistema laboral, en el cual tiene hijos (y sigue trabajando) quien tiene el privilegio, y no quien tiene el deseo.

Conciliar es hoy en día un auténtico privilegio, o una condena de por vida.

Nos cuenta relatos de primera mano, que son el reflejo de, por desgracia, tantísimas mujeres, que perdieron sus empleos (que nunca pudieron recuperar, por decisión propia o imposición vital) por esas criaturas que venían en camino o estaban ya en brazos, que el sistema demanda, pero luego abandona.

Por que nos venden que ser madre es nuestro cometido, que formar familia es la meta principal de una pareja, para poder sostener nuestro modelo económico, pero luego pretenden que sigamos aportando al sistema laboral y económico como si esas criaturas no existieran y no fueran nuestras, para querer y cuidar.

Conciliar en España: querer vs poder.

Sin dejar de lado los terribles horarios laborales españoles, ni esa imagen de madre perfecta que la sociedad nos vende para que estemos más ocupadas intentado cumplir expectativas imposibles, que reclamando derechos que nos deberían corresponder. Y por supuesto, el tema más tabú de todos: conciliar sin hijos. Porque en este país necesitamos mejorar la conciliación y que el hombre se corresponsabilice de ella, pero no sólo con respecto a los niños, sino con una de las poblaciones crecientes, como son las personas mayores y/o dependientes.

Y con las pilas cargadas y los humos bien subidos la parte más reflexiva, por parte de la autora, acaba y empieza la chicha, al menos a nivel de disparidad de opiniones, del libro.

14 opiniones para todos los gustos y colores.

Cómo os dije en stories, este libro es para todos, porque tienes opiniones para todos los gustos y maneras de ver la crianza de todos los colores.

Pienses como pienses, este libro es para ti, pues habrán testimonios y opiniones en Conciliaqué con los que estés totalmente de acuerdo, otras que dirás si pero no, y otras tantas en las que dices, pffffffff.

Desde Rosa Jové, Ibone Olza o Carlos Gonzalez, a través de Alvaro Bilbao o Teresa Castro, pasando por Beatriz Gimeno o Jose Luis Casero, hasta Marga León o María Pazos (gesto de desaprobación).

Yo tengo claro que opiniones no acabo de comprar y qué personas, hombres y mujeres, no resuenan (ellas y su discurso) en absoluto conmigo. Otras tantos, me ha resultado interesantes de conocer, aunque no me hagan cambiar de opinión. Y otros me han enfadado un mijita y me han dado ganas de lanzar el libro bien lejos (pobre, qué culpa tiene…).

La conciliación o la conciliaqué, en diferentes visiones.

A través de las preguntas que va formulando Maika, cada uno de los 14 entrevistados, nos muestra una visión, única y personal, del estado actual de la conciliación, de la maternidad, la crianza y, evidentemente, la conciliación (o más bien la falta de ella).

Sin entrar en quien dijo qué, evidentemente os he mostrado a menudo contenido de PETRA, y como expliqué en su día, considero que deberíamos poner el foco en los peques, que son esos seres que no eligieron venir al mundo, sino que les “obligamos” nosotros, y buscar la mejor opción para ellos. Algo, que para mi no puede pasar si no por ampliar el permiso para LAS FAMILIAS, dejando libertad a éstas para elegir como pasar el máximo tiempo posible con las criaturas dependientes que han traído al mundo.

Conciliando a costa de los niños.. Lo peor de la conciliaqué.

Y no le sorprenderá a nadie, que se me revuelven los higadillos cuando leo testimonios a favor de sacar a los niños (obligatoriamente) de casa a edades demencialmente tempranas y que sea papá estado, a través de MUJERES (porque siempre lo son) con empleos precarios (todo muy rueda de hámster) el que cuide a esas criaturas cuyo mejor lugar es cerca de mamá o papá.

En definitiva, Conciliaqué es un libro para reflexionar, para pensar y para comprender, también, cómo hemos llegado aquí y cómo nos cuesta avanzar en según qué aspectos.
Como unas luchas fagocitan a otras, y en mi opinión sólo consiguen crear una neblina muy oportuna para el sistema que se beneficia de nuestra precariedad y nuestra falta de recursos y salidas.

Que sigue beneficiándose del fruto de esa maternidad «deseada/impuesta», a costa de que el peso de conciliar, de mantener a ese «bien común», recaiga en los individuos, con la mayor crudeza en los menos privilegiados.

Para mi Conciliaqué ha pasado a ser uno de los libros importantes de la libería maternal, esos que tienen el honor de estar maltratados, doblados, marcados y anotados, porque su lectura me aporta algo más que un rato de ocio.

Si no sabéis qué regalar a una nueva mamá, o queréis vosotros mismos, leer algo que os remueva sea como fuere en el terreno de la mapaternidad, para mi es una apuesta segura. Y no dejéis de pasaros por la editorial Litera, que son una empresa pequeñita con títulos gigantes y necesarios, de los cuales ya os iré enseñando más.


Si te gusta lo que lees en este blog, puedes suscribirte a la derecha, y estaré encantada de leerte en los comentarios.


También te puede interesar:

Me encantaría conocer tu opinión!

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

A %d blogueros les gusta esto: